Cualquier salida o sanación pasa por nuestra libertad porque, para mí, cualquiera de nuestros problemas viene también de nuestra libertad.
Puedo pensar que alguien está muy equivocado a la hora de plantearse como afronta un problema, pero sé que es tan sólo mi visión y que lo más importante es la libertad del otro para escoger lo que considere siempre más adecuado.
Porque yo veo desde la perspectiva que me da mi vida, no desde la que viene de la suya, y cada cual es la máxima autoridad en la materia de su propia vida.
Somos libres para poder rectificar porque somos libres para equivocarnos.Somos libres para escoger la esclavitud o para decidir salir de ella.
Tenemos siempre mucho más margen de responsabilidad y libertad con respecto a lo que sucede en nuestras vidas de lo que tendemos a creer. Porque nunca somos víctimas de lo que nos pasa, aunque siempre podamos ser, por supuesto, inocentes de cualquier tipo de culpa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario