jueves, 27 de abril de 2017

RELACIONARNOS CON LOS DEMÁS


Cuzco es una ciudad hermosa y volcada en el turismo. Esto ayuda a comprender mejor un poco como funciona el viejo paradigma que ha dominado el mundo.

La mayoría de las personas de aquí con las que te encuentras son personas cuya supervivencia depende de que consigan vender algo al que viene de fuera.

Y, a veces, eso hace que la atención se distraiga, porque además hay una gran disparidad de precios para un mismo objeto o servicio. Así, uno va buscando compulsivamente el precio más barato que le permita rentabilizar su consumismo en un mercado permanente.

Eso dificulta las relaciones puesto que hay un elemento de interés muy poderoso por ambas partes. Algo que, por otra parte, es sólo como una lupa de lo que pasa en cualquier otro lugar del mundo.

Y como en cualquier otro lugar, nos es posible elegir relacionarnos con nuestros semejantes más allá de ese juego de mercadeo. Basta con ver a las personas como tales, no como vendedores, y de comportarnos nosotros también como personas, no como simples consumidores.

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