jueves, 31 de enero de 2019

CUANDO NO VEMOS SALIDA.



Hay veces que uno no ve salida a la situación vital por la que está pasando. Pero, en esos casos, el que uno no vea salida no quiere decir que no la tenga, simplemente quiere decir que no la ve.

A veces estamos tan obcecados y absorbidos por el problema que no tenemos la menor perspectiva para ver la solución.

La vida es como el agua, siempre encuentra salida por uno o por otro sitio, por si sola busca la salida en que hay menor resistencia.

La mayor parte de la ansiedad viene de imaginarnos un futuro catastrófico en el que cada vez estamos peor. 

Y la salida más evidente para eso está en vivir centrado en nuestro presente, en lo que realmente ocurre aquí y ahora y en ver como respondo a aquello que está pasando. Si sé afrontar mi presente sabré afrontar mi futuro cuando se convierta en presente.

miércoles, 30 de enero de 2019

PENSAMIENTOS Y EMOCIONES.



Hay veces que anímicamente nos encontramos mal y esto puede ser un proceso natural cuando estamos asumiendo algo que nos cuesta aceptar.


Es importante, cuando estamos con fuertes emociones de miedo, frustración, enfado, tristeza, etc., que sepamos tomar distancia de los pensamientos que nos vengan.

Hemos de tener claro que nuestros pensamientos son de una mayor calidad cuando estamos serenos y equilibrados que cuando estamos muy inquietos e inestables.

Ya habrá tiempo de tomar decisiones o de plantear la solución del problema. Hay que dejar que pase la tormenta y lo prioritario es recuperar la calma.

Para ello procura ser generoso contigo como lo serías con un amigo que se encuentra mal, tómalo con calma, haz cosas que te gusten o, simplemente, no hagas nada, limítate a sentir tu cuerpo y tu respiración sin meter mente en ello.

martes, 29 de enero de 2019

ABRIRNOS AL MISTERIO.



En la vida existen muchas cosas que están más allá del entendimiento, de nuestra capacidad de comprensión, son elementos que se mueven en un misterio sagrado.


A veces, desde una lógica materialista se le da un significado o explicación simplista que no deja de ser artificial, algo para que encaje en nuestro limitado esquema racional.

Así, por ejemplo, se abusa del azar para no tener que explicar las causas desconocidas de muchas de las cosas que vivimos, como la familia en la que venimos, o que, de repente, caigamos gravemente enfermos.

Y muchas de esas cosas tienen causas que sí que podemos llegar a conocer, y aún así habrá siempre una parte de la realidad que permanecerá en el misterio, que seguirá siendo inexplicable.

Y en esas situaciones se trata de ser honestos y no buscar simplificaciones, de abrirnos, con confianza profunda, a los misterios de la vida y de fluir en ellos.


lunes, 28 de enero de 2019

CODEPENDIENCIA AFECTIVA.


A veces existe una cierta tendencia en nosotros a sentirnos culpables cuando alguien de nuestro entorno cercano se encuentra emocionalmente mal.

Se nos ha educado en una codependencia tóxica que hace que se desdibujen los límites de nuestra responsabilidad emocional.

Y hay que tener claro que somos los responsables de nuestro campo emocional, ni nosotros somos responsables del campo emocional de otros, ni los demás lo son del nuestro. 

Y la mejor ayuda que podemos hacer a las personas de nuestro entorno es estar bien emocionalmente nosotros y permitirles a ellos sentirse como se sientan.

Desde afuera podemos simplemente ayudar a que otros se sientan algo mejor, pero la responsabilidad de encontrarse bien y de trabajar para ello si es preciso, recae siempre en cada persona.

domingo, 27 de enero de 2019

EL SENTIDO DE LA VIDA.



Hay quienes consideran a la vida como una especie de broma pesada sin el más mínimo sentido. Y otros que desisten de preguntarse sobre si tiene o no sentido para ellos.

Pero cuando el ser humano no encuentra sentido, suele vivir perdido y preso de sus miedos. 

Podemos encontrar sentidos a la vida. Podemos ver cómo determinadas actitudes nos facilitan la vida y como otras nos la ponen más difícil, y eso ya nos está indicando la existencia de un sentido.

Y podemos ver que lo que más nos hace sufrir es aquello que va en la dirección contraria a ese sentido y que fluimos y las cosas nos van mejor cuando vamos en el mismo sentido en el que va la vida.

Es cuestión de estar atentos y de profundizar en ambas cosas, en la vida y en la manera concreta que tenemos de vivirla, y de ver si ambas están o no en armonía.

sábado, 26 de enero de 2019

MIRAR EL INCONSCIENTE.



En neurología se ha constatado que más del 95% de las decisiones las toma el inconsciente, y que, en una decisión, las áreas inconscientes se activan ocho segundos antes que las conscientes. 

Lo que hacemos con el consciente es, en la mayoría de los casos, simplemente justificar con argumentos la decisión tomada.

Y suele comparase a la mente con un iceberg en el que la mayor parte sumergida corresponde a la mente inconsciente.

Resulta sorprendente que, sabiendo esto, la mayoría de las personas se sigan negando a ver cómo funciona su inconsciente y los elementos que hay atrapados en él y que están condicionando poderosamente sus vidas.

De no ir sanando ese inconsciente y viendo qué elementos podemos traer al consciente, nos limitamos a comportarnos como autómatas que reaccionan siempre en función de unos patrones ocultos desconocidos.

viernes, 25 de enero de 2019

MENTES Y CORAZONES ABIERTOS.



Hay mentes cerradas que no se cuestionan nada, que se aferran a lo conocido y a su limitada visión de la realidad.

Y hay corazones cerrados que sólo se relacionan con un número muy limitado de personas que consideran de los "suyos", ajenos e indiferentes al resto del universo.

Y no es cuestión de ser extrovertidos o introvertidos, más o menos tímidos. Va más allá de eso. 

De hecho cuando nos abrimos de verdad combinamos ambos aspectos. Tenemos contacto con nuestro mundo interior, como los introvertidos, y a la vez podemos expresar ese mundo interior a los demás, como hacen los extrovertidos.

Cuando una persona tiene su mente y su corazón abiertos, ventila y oxigena todas las relaciones en las que participa, y va ayudando, con su mera presencia, a que los demás también puedan ir abriéndose.

jueves, 24 de enero de 2019

LIMITAR RELACIONES.



Muchas personas limitan sus relaciones a unas cuantas personas de su entorno, normalmente familiares o algunos amigos y crean con ellos una relación de dependencia. 

Es un intento de crear una especie de refugio afectivo en un mundo que se considera bastante inhóspito y difícil.

Yo considero que vamos hacia unas relaciones más reales y flexibles, en las que podamos establecer vínculos de confianza en poco tiempo, en las que la distancia física no importe demasiado si los corazones se sienten cercanos.

Relaciones que permitan ser al otro lo que es, en las que puedes estar años sin saber nada de él, respetando sus procesos, y lo sigues sintiendo cercano.

La clave es si vivimos las relaciones desde un apego condicionado por el miedo a la soledad, al otro y a nosotros mismos, o si las vivimos desde el puro amor y desde la confianza que de él emana.

miércoles, 23 de enero de 2019

¿QUÉ TRASMITES DÓNDE ESTÁS?



¿Qué transmites allí dónde estás? ¿Transmites paz y serenidad? ¿La gente se siente cómoda contigo o se siente tensa y con miedo a tus reacciones?


Observa a tu alrededor lo que los demás reciben de ti, porque eso también habla de cómo te encuentras en tu interior.

La mejor manera de defender la paz es la de sentirla en nuestro interior y trasmitirla a los demás. Es una incoherencia decir que se defiende la paz o el amor desde el enfado permanente y desde una constante tensión.

Y vemos esto en los ámbitos en los que nos movemos, como el familiar o el laboral. Es ahí donde vemos si estamos realmente relajados en nuestra vida o si vivimos desde el enfado o el miedo.

Como decía una conocida frase de Gandhi: "no hay caminos para paz, sino que la paz es el camino".

martes, 22 de enero de 2019

LA SENCILLEZ Y LA VISIÓN SIMPLISTA.



Lo auténtico es realmente sencillo, pero para llegar a esa sencillez hay que desliar la complicada madeja que hemos construido en torno a la realidad.

Cuando no lo hacemos así, nuestra tendencia es a buscar una visión simplista de esa realidad que elimine los matices.

La visión simplista permite no cuestionar ni investigar nada a fondo. Nos ofrece respuestas de fast food, precocinadas y sin mucha sustancia alimenticia.

En la visión simplista suele haber, entre otras cosas, buenos y malos y los malos son siempre los otros, aquellos que no son o no piensan como nosotros.

Y es que, para encontrar la auténtica sencillez, se hace preciso buscar en nuestro interior y eliminar así todas esas fantasías que tanto nos complican la vida.

lunes, 21 de enero de 2019

DEJAR LAS PUERTAS ABIERTAS.



Hay quien va cerrando las puertas de su corazón a muchas personas a su alrededor, porque no comparte sus puntos de vista, porque las considera tóxicas o negativas, o que no están a su altura...

No se dan cuenta de que mientras más encerrado viva su corazón menor será su capacidad de amar, de sentir amor y del gozo interno que eso conlleva.

Y que para que cada una de esas puertas permanezca cerrada necesita contarse mentiras que justifiquen ese cierre, razones por las que considera que el otro no merece su amor o consideración.

Yo creo que es inevitable que tengamos diferencias con otras personas, y que puede que haya personas con las que sintamos que tenemos que mantener una cierta distancia.

Pero no creo en la necesidad de cerrar las puertas, la vida es larga y no sabemos si volveremos a coincidir en el camino. Que las puertas queden siempre abiertas para ello y que nuestro corazón permita que el amor salga a raudales por todas ellas.

domingo, 20 de enero de 2019

HABLAR SIN MIEDO.


Vivimos en una sociedad a la que aún le cuesta aceptar la dimensión espiritual, en cierta parte debido a los excesos cometidos por la religión.


Y, muchas veces, aquellos que sentimos que esa dimensión espiritual es esencial para el ser humano y para entender su profundidad, tendemos a callarnos como avergonzados y con miedo a ser rechazados.

No se trata de imponer nada a nadie, quien quiera puede negar la dimensión espiritual y pensar que son tonterías, pero los que sí la sentimos no tenemos porqué escondernos o callar.

Se trata, sencillamente, de expresar lo que sentimos y pensamos con naturalidad, no como quien está en posesión de la verdad absoluta, sino como quien expresa lo que íntimamente siente.

No sólo somos dimensión espiritual y podemos hablar de muchas otras cosas, pero no hay razón alguna para no hablar, desde el respeto, de esto que consideramos tan esencial en nuestra forma de entender la vida.




sábado, 19 de enero de 2019

PERDONAR POR UNO MISMO.


Perdonamos para nosotros mismos más que para el otro. El perdón nos sana y nos libera del pasado.

Perdonamos para no sentir una emoción que bloquea nuestra capacidad de amar y que nos altera y desequilibra.

Perdonar nos ayuda a comprender que los errores forman parte inevitable del ser humano, y que si yo considero imperdonables los errores del otro, inconscientemente también consideraré imperdonables los míos.

Y hemos perdonado cuando podemos pensar en lo que sucedió o en la persona con la que estábamos enfadados desde la serenidad, sin alterarnos ya por el recuerdo.

Perdonar y perdonarnos es una de las mejores maneras de aligerar nuestro peso del pasado para poder caminar más ligeros hacia un futuro diferente en el que nos permitamos amar de forma completamente incondicional.

viernes, 18 de enero de 2019

AYUDAS.



Es interesante plantearse como ayudamos a otras personas y lo que hay detrás de ello.

Tradicionalmente se nos ha insistido en las bondades del sacrificio por los demás, pero para mí eso tiene algo de masoquismo y de negación de nosotros mismos. Y, además, es posible que sintamos incluso que el otro nos debe algo.

Prefiero la ayuda natural que viene de nuestra forma de ser esencial y que tiene que ver con nuestra autorrealización natural. Igual que el árbol ayuda con su sombra o el Sol con su calor. Ayudar siendo nosotros mismos.

Y además considero esencial que esa ayuda sirva para que el otro vaya siendo más autónomo e independiente, y no más dependiente de mí. Lo de enseñarle a pescar en lugar de darle un pez.

Ayudar es algo maravilloso que hace la vida más hermosa, pero siendo conscientes de lo que hay detrás de ello, de nuestras motivaciones reales para esa ayuda.

jueves, 17 de enero de 2019

AÑO NUEVO.



En el día de Año Nuevo solemos hacer una especie de lista de buenos propósitos para el año que comienza, para mejorar nuestra vida.

Y realmente es un momento tan bueno como cualquier otro para hacerlo. Porque cada instante es nuevo y sagrado y nos ofrece la oportunidad de hacer cambios en nuestra vida.

Y, más aún, cada instante estamos tomando realmente la decisión de mejorar nuestra vida o de permitir que siga igual, o que siga su proceso de deterioro o decadencia.

Nuestra vida no es sino el resultado de esos instantes y de esas decisiones. Porque el comienzo de año pasará pero si queremos un cambio real deberemos persistir en la decisión durante todos los instantes de este nuevo año.

Porque somos la persona con más influencia real en el ámbito de nuestra vida y nadie puede decidir por nosotros, decide sin dudarlo un Feliz Año Nuevo.

miércoles, 16 de enero de 2019

EL MAESTRO ESTÁ DENTRO.



Está muy bien leer o escuchar a otros a quienes valoramos, pero no hasta el punto que solapen nuestra propia voz.


Uno ha de tener su propio criterio formado, nacido de su observación sobre la realidad que vive y de la observación de su realidad interna.

De no ser así, corremos el riesgo de ser una veleta movida por el viento de lo último que nos llega, unas veces en una dirección y otras veces en la dirección contraria.

En realidad, cuando más interesantes son las aportaciones que nos llegan es en las ocasiones en que se nos permiten definir mejor y ajustar nuestro criterio propio. Nos dan pinceladas que nos aclaran el conjunto.

Pero siempre sabiendo que el maestro más importante está en nuestro interior y es esencial también que dejemos el silencio necesario como para poder escucharle.

martes, 15 de enero de 2019

DISTRAÍDOS EN FANTASÍAS.



Querer que las cosas sean otra cosa que lo que son es un gasto inútil de energía. Considero más interesante saber ver y aprovechar lo que realmente es.

Es como que nos pasamos la vida distraídos en múltiples fantasías sobre lo que me gustaría que fuese en lugar de ver y de sacar el potencial de lo que es.

Y esto empezando por nosotros mismos. Solemos despreciarnos y desear ser otra persona o envidiar a otras personas, en lugar de aprender a vernos con respeto y centrarnos en desplegar nuestro inmenso potencial interior.

Despreciamos también muchas veces a los demás con nuestras expectativas de cómo me gustaría que fuesen en lugar de ver lo que realmente tienen de valiosos en su forma de ser.

Observa toda tu realidad con calma y sin juicio, y a partir de ahí, y desde la paz que eso te da, centra tu energía en disfrutar de todo lo que es y en crecer con ello.

lunes, 14 de enero de 2019

MIRAR CON DISTANCIA.



A veces es importante mirar las cosas desde una distancia suficiente como para permitirnos contemplar con amplitud lo que sucede.

Cuando vemos algo que percibimos como una injusticia tendemos a enfocar nuestra comprensión en la parte de la víctima.

Nos cuesta entender que en esos sucesos la clave es la dinámica que se da entre las dos partes. Algo parecido a lo que ocurre en la compraventa. Para que haya un verdugo ha de haber una víctima y para que haya una víctima ha de haber un verdugo.

Y nos identificamos más con la víctima porque nos cuesta ver al verdugo que hay en nosotros y lo escondemos en nuestro inconsciente.

Y no nos damos cuenta que muchas veces, cuando más agresores somos, es cuando más consideramos que somos víctimas y que eso es, precisamente, lo que usamos para justificar nuestra agresividad.

domingo, 13 de enero de 2019

OBSERVAR LAS PRIORIDADES.


Detente un instante, observa tu vida y descubre qué prioridades has establecido en ella, qué es lo que ocupa tu tiempo y tus pensamientos.

Es importante ver si somos coherentes con nuestras prioridades. Porque lo que de verdad importa no es lo que creemos que es importante para nosotros, sino aquello que realmente priorizamos.

Y muchas veces justificamos esa incoherencia, el hecho de que vivamos centrados en cosas que deberían ser secundarias para nosotros, con la excusa de que lo hacemos por otros.

Ya no hay excusas, somos responsables de nuestra vida y de lo que hacemos ante nosotros mismos, no carguemos sobre los hombros de los otros esa responsabilidad.

Estamos en un momento que exige de nosotros coherencia, honestidad y autenticidad . Y los demás tampoco se merecen menos de nosotros.

sábado, 12 de enero de 2019

NAVIDAD Y SOLSTICIO DE INVIERNO.



Con la Navidad celebramos el solsticio de invierno. La palabra solsticio viene del latín Sol sistere, que significa que el Sol está quieto. 

Es cuando el Sol hace el cambio, cuando los días van a empezar a crecer de nuevo y poco a poco va a ir volviendo a la luz. De alguna forma es como que el Sol vuelve a nacer. 

Ya antes del cristianismo y en otras culturas como la de los incas, se celebra este acontecimiento. El cristianismo lo tomó por el fuerte contenido simbólico que eso suponía, siendo Jesús la luz que llegaba al mundo.

Es una fiesta que celebra así la vuelta de la luz, quizá por ello nos gustan tanto las luces navideñas.

Que la luz de nuestro interior se renueve también y que comience a ir creciendo en este cambio de ciclo.



viernes, 11 de enero de 2019

JUZGAR ES NO COMPRENDER.



Sólo podemos juzgar aquello que no comprendemos y es nuestra ignorancia la que se atreve a juzgar a otros.

Cada persona actúa como puede y como sabe en una vida en la que no existe un manual de instrucciones y en la que cada cuál trae una mochila diferente de su pasado.

Juzgamos desde nuestro criterio parcial, nunca desde la visión del otro. Y lo que hacemos con nuestro juicio es, simplemente, definirnos a nosotros mismos, más que definir al otro.

Porque mi juicio me habla de mis valores y de mis prioridades que, obviamente no son las mismas que las que pueda tener la persona a la que juzgo.

Y es que el juicio nos mantiene encapsulados en nosotros mismos y en nuestra visión limitada de la realidad. Es la comprensión del otro y de sus circunstancias y el esfuerzo que eso conlleva, lo que nos permite, realmente, abrirnos hacia fuera y ventilar nuestra mente.

jueves, 10 de enero de 2019

LA DIFICULTAD DE LA MENTIRA.



Mentir exige mucho más esfuerzo mental que decir la verdad, y genera la tensión de tener que sostener las mentiras y de vivir con el miedo de ser descubiertos.

Y de todas las mentiras, la peor de todas, como nos decía Patanjali, es la que nos decimos a nosotros mismos.

Muchas veces construimos un castillo de autoengaños para evitar afrontar nuestro dolor, para intentar desviar la mirada de aquello que no queremos ver.

No comprendemos que con ello lo único que hacemos es perpetuar de forma indefinida nuestro sufrimiento. Porque resistirnos a lo real, a lo que es, es lo que mas nos hace sufrir.

Cada vez es más difícil sostener nuestras mentiras ya que estamos en un momento que exige de nosotros mirar con honestidad nuestra vida e ir desenmascarando todos los engaños y estrategias para poder alcanzar, así, una visión más clara de lo que es, de lo que somos.

miércoles, 9 de enero de 2019

LA INDIGNACIÓN COMO MALESTAR INTERNO



Podemos indignarnos mucho con algo que sucede a nuestro alrededor, pero nuestra indignación no deja de hablar de lo que a mí me duele en mi interior.

Y en muchas ocasiones utilizamos esa indignación para canalizar la rabia interna que aún no hemos sanado, para proyectar lo que no aún no hemos resuelto.

Nos cuesta darnos cuenta que con ese desequilibrio interior es muy difícil que podamos ayudar realmente a cambiar algo y que lo único que conseguimos es complicarlo todo un poco más.

En esos casos lo único que aportamos es más ira, rabia, dolor y confusión, aunque sea disfrazada, más o menos hipócritamente, de una noble causa.

Es importante entender que lo mejor que podemos aportar al mundo en el que vivimos es de lo que mas necesitado está, y que no es otra cosa que nuestra paz, fruto de nuestra reconciliación interna, y el amor que eso permite que desprendamos allí donde nos encontremos.

martes, 8 de enero de 2019

SANAR UNA RELACIÓN.



Considero que conseguimos sanar una relación cuando en nosotros ya no quedan emociones como el enfado, el reproche o el rencor hacia el otro. Cuando podemos pensar en él en paz y desearle de corazón que le vaya bien.

Y eso no implica que la relación tenga que ser maravillosa o que queramos más o menos a esa otra persona. A veces eso ya no está en nuestra mano y no podemos forzar la comunicación con el otro, podemos llegar donde podemos llegar en nuestra afinidad.

Por otro lado, es posible también que el otro no quiera sanar su parte en el enfado, y no tiene obligación ninguna de hacerlo, es su libre elección.

Lo que realmente más nos afecta y nos bloquea es lo que nosotros sentimos en nuestro interior, nunca lo que siente el otro.

Por eso lo importante es hacernos conscientes de las emociones que los demás nos suscitan y cuando sintamos emociones negativas hacia el otro, hacernos conscientes de qué es lo que tenemos que resolver en nosotros y que estamos proyectamos en él.

lunes, 7 de enero de 2019

YA LO DECÍA BUDA.



Ya en el "Dhammapada" atribuido a Buda se nos decía: "En este mundo, el odio nunca cesa a través del odio; sólo cesa a través del amor. Ésta es una ley eterna".

Y aún hoy seguimos justificando el odio al "mal" como positivo. Cuando nos encontramos con algún hecho que es fruto del odio, creemos tener barra libre para odiar también nosotros.

El odio al "mal" no deja de ser odio con todas las características del mismo y tiene muy poco que ver con el amor al "bien".

Y es más, como he indicado, aprovechamos determinadas situaciones que consideramos injustas para descargar nuestro odio y nuestra agresividad interna.

Como bien dice otra frase de Buda con la que coincido plenamente: "El conflicto no es entre el bien y el mal sino entre el conocimiento y la ignorancia".

domingo, 6 de enero de 2019

AMOR O MIEDO.




Hay determinadas noticias que despiertan una importante alarma social, y son, precisamente esas noticias, a las que más importancia se les da.

Ahora bien, nuestra disyuntiva va a ser siempre la misma, la de elegir si queremos vivir en el amor o en el miedo. En la desconfianza permanente o en la confianza.

Y de eso dependerá lo que aportemos a nuestra sociedad. Porque el miedo no sólo lo provocan los agresores sino todos aquellos que se dejan llevar por él.

¿Qué fomentan los noticiarios que escuchamos? ¿el miedo o la confianza? ¿Nos sirve para algo ese miedo? ¿Nos lleva acaso a vivir en una sociedad más segura?

Me niego rotundamente a vivir en el miedo permanente porque el miedo nos incapacita y nos hace sumisos, nos anula como personas y nos impide amar. Es siempre la confianza lúcida y despierta la que nos lleva a continuar en positivo hacia adelante.

sábado, 5 de enero de 2019

SER COMPRENSIVO Y SER COMPRENDIDO.



Olvidamos constantemente que, en realidad, es mucho más importante ser comprensivo que ser comprendido.

Nuestra obsesión por ser comprendidos es, en la mayoría de los casos, fruto de la incomprensión que sufrimos en nuestra infancia. En esa actitud aún persiste el sentimiento de ser una víctima.

Es importante asumir nuestra responsabilidad y entender que si nadie nos comprende puede ser que nuestro planteamiento sea muy poco claro o que no nos sepamos explicar muy bien.

O también puede significar que estamos en un punto de evolución al que los demás aún no han llegado, pero cuando esto se da nosotros sí que comprendemos perfectamente la falta de comprensión de los demás porque, en su momento, también estuvimos en ese punto.

Cuando de verdad comprendemos a otro, sus razones y sus circunstancias, tendemos a juzgar menos y a amar más, lo cual, por otro lado, siempre es lo mejor para nosotros.

viernes, 4 de enero de 2019

ZONAS DE CONFORT.


De vez en cuando conviene estar atentos a las señales que indican que nos hemos acomodado demasiado a una situación, y preguntarnos honestamente si es adecuado o no para nosotros.

Estar atentos para ver si nos hacemos demasiado dependientes de algo o de alguien y si eso merma y de qué forma nuestra propia libertad.

Es un ejercicio de salud y de higiene vital, para no ir dejando que las ataduras nos anulen demasiado, que nos impidan evolucionar y realizar los cambios que precisamos en nuestra vida.

Porque lo adecuado, también, es que en nuestras relaciones se vayan reflejando esos procesos internos de cambio por los que pasamos y que vayan ajustándose a ellos.

Porque la vida es fluir en el cambio y continuar el camino de evolución. No existen lugares de estancia permanente y lo que hemos es de aprender a adaptarnos y disfrutar en ese cambio.

jueves, 3 de enero de 2019

IMPORTANCIA DE LAS RELACIONES.


Pocas cosas hay en la vida tan importantes como las relaciones personales. La forma en que vivimos esas relaciones es indicativo de cómo nos encontramos y de cómo somos.

Las relaciones nos hablan de nuestro nivel de autoestima. El cómo nos tratan los demás es reflejo de cómo nos tratamos a nosotros mismos. Cuando no nos respetamos permitimos que no nos respeten o nos permitimos no respetar.

Las relaciones me muestran la personalidad que he asumido, si tiendo a controlar y a dominar o si tiendo a ser sumiso y complaciente.

Lo que me molesta de los demás me habla de mi código moral y de aquello que yo no me permito a mí mismo. Porque lo que me molesta siempre me habla de mí mismo.

La clave es estar dispuestos a leer con honestidad las relaciones, porque cuando somos honestos con los demás es cuando también somos honestos con nosotros mismos.

miércoles, 2 de enero de 2019

SANAR LA RELACIÓN CON NOSOTROS MISMOS.


Lo primordial para tener unas relaciones sanas con los demás es sanar la relación que tenemos con nosotros mismos.


Todo desequilibrio en esa relación con nosotros mismos va a suponer un desequilibrio en nuestras relaciones y va a ser, posiblemente, una fuente importante de conflictos.

Expectativas irreales con respecto al otro, dinámicas tóxicas de relación que nos impiden crecer, codependencia, etc., son ejemplo de ello.

Antes las relaciones eran rígidas y estaban basadas en roles muy definidos, y eso hacia que se mantuvieran a pesar de todas las crisis y tensiones, a pesar de la violencia implícita que pudiera haber en ella o de la toxicidad de la relación.

Hoy los tiempos han cambiado y las relaciones no permiten ya jugar en otro campo que el de la honestidad y la voluntad de ir sanando, también, la relación con nosotros mismos a través de lo que nos muestra de nosotros mismos la relación con el otro.