Existe en cada uno de nosotros un inmenso poder de transformación. Y cuando liberamos ese poder mediante nuestra propia transformación, transformamos a toda la humanidad.
Pocas cosas hay tan irreales como ese "yo es que soy así". La realidad es que no somos formas tan definidas y estáticas, somos seres en continuo cambio.
Y cuando nos quedamos fijos en nuestra forma anterior de ser es porque cerramos los ojos a esos cambios y jugamos a que no se dan, ni en nosotros, ni en los demás, a los que tratamos como si no hubiesen cambiado.
Cuando ponemos consciencia en ese proceso de cambio, y cuando sabemos como hacer para que sea favorable a nuestra evolución, es cuando ayudamos a la humanidad a que vaya evolucionando.
Porque la responsabilidad que tenemos hacia nosotros mismos es la misma que tenemos hacia el conjunto de la humanidad representada en cada uno individualmente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario